Alice (Julianne Moore), una prestigiosa profesora universitaria de lingüística, casada y con tres hijos, que comienza a olvidar algunas palabras y a tener lapsus mentales, decide someterse a unas pruebas médicas que revelan que está sufriendo la etapa inicial de la enfermedad de Alzheimer.
Adaptación de la novela de Lisa Genova que describe la enfermedad más dura que puede padecer un ser humano, y que se ceba sobre una mujer que acaba de cumplir 50 años.
Dirigida por Richard Glatzer y Wash Westmoreland ("Quinceañeras"), "Siempre Alice" es una película compacta y absorbente que proyecta en pantalla -de una manera delicada- el tremendo drama de una mujer brillante, inteligente y con una gran personalidad que deja de ser ella misma. Iremos viendo el impacto que tiene la enfermedad sobre la vida de Alice, su día a día, la impotencia que supone perder la memoria, no sólo en su vida profesional -recordemos que es profesora universitaria-, sino también en su vida familiar y social. La protagonista se encerrará en si misma y en su fuerza de voluntad para no desvelar su problema a su entorno más cercano.
Lo mejor, sin duda, la sensacional interpretación de Julianne Moore, que después de cuatro nominaciones a los Oscar, ha conseguido la estatuilla a la Mejor Actriz Principal por este papel.
Julianne Moore se luce sin caer en el sentimentalismo, y transmite la fuerza dramática en su justa medida. Sus miradas, sus gestos y su aspecto físico consiguen plasmar en pantalla el proceso de degradación de una manera honesta y veraz. Brillante el momento en el que no reconoce a su hija (Kristen Stewart) tras una representación de teatro.
Correctos, Alec Baldwin (su marido) y Kristen Stewart, quienes forman parte del plantel principal del film.
Otras películas que han tratado el tema del Alzheimer han sido:
-"Amor" de Michael Haneke, Oscar a Mejor Película de habla no inglesa en 2012.
-"Iris" (2001) de Richard Eyre. Con Kate Winslet y Judi Dench.